Cláse de mendicidád

Háce únas semánas, estába tomándo el desayúno en un bar cérca de cása, cuando un hómbre, un mendígo al que reconocí, ya que lo he vísto várias véces pidiéndo a la salída del métro, se acercó y me díjo que si le podía dar álgo pára el desayúno.

Le díje que si tomába lo mísmo que yo o similár (tostáda con acéite y un café con léche) que estába invitádo, me díjo que sí, lo pedí, y la empleáda no díjo náda péro por la manéra de mirárlo, parecía que éra costúmbre habituál del mendígo el hacér éso.

Descárge el cuénto aquí

 


2 respuestas a “Cláse de mendicidád

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s